MADRID, 09 (SERVIMEDIA)
Investigadores de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Universidad de Birmingham comprobaron que el método ‘E-Motive’, que incluye detección temprana y administración inmediata de tratamientos, reduce en un 60% el sangrado severo después del parto.
Según informó este martes la OMS, el estudio, que acaba de publicarse en la revista ‘New England Journal of Medicine’, puso de manifiesto que el método ‘E-Motive’ incluye la detección temprana y precisa de la hemorragia posparto utilizando un paño de recolección de sangre denominado ‘cortina’.
Esto se completa con un paquete de tratamiento inmediato cuando esté indicado, que incluye masaje uterino, medicamentos para contraer el útero y detener el sangrado, administración de líquidos intravenosos y, cuando sea necesario, derivación de la paciente a atención avanzada.
La hemorragia posparto, definida como la pérdida de más de 500 ml de sangre dentro de las 24 horas posteriores al nacimiento, es la principal causa de mortalidad materna en todo el mundo. Se estima que afecta a 14 millones de mujeres cada año y provoca alrededor de 70.000 muertes, principalmente en países de ingresos bajos y medios, lo que equivale a una muerte cada seis minutos.
ATERRADORA E IMPREDECIBLE
En este sentido, la directora de Salud Sexual y Reproductiva e Investigación de la OMS y jefa del Programa Especial de Investigación, Desarrollo y Formación en Investigación en Reproducción Humana (HRP) de las Naciones Unidas, la doctora Pascale Allotey, destacó que “la hemorragia posparto es aterradora, no siempre predecible, pero absolutamente tratable. No obstante, sus impactos en todo el mundo son trágicos”.
“Ninguna mujer debe temer por su vida al dar a luz. Las soluciones efectivas para abordar el sangrado posparto deben estar disponibles y ser accesibles para que todas las mujeres puedan experimentar un parto seguro y un futuro saludable con sus familias”, añadió.
El estudio, en el que participaron más de 200.000 mujeres en cuatro países, encontró que medir objetivamente la pérdida de sangre utilizando un dispositivo de recolección simple y de bajo costo llamado ‘cortina’ y agrupar los tratamientos recomendados por la OMS ofreció mejores resultados para las mujeres. De hecho, el sangrado severo, cuando una mujer pierde más de un litro de sangre después del nacimiento, se redujo en un 60%, con una menor probabilidad de morir.
MENOS TRANSFUSIONES
Del mismo modo, hubo una reducción sustancial de la tasa de transfusiones de sangre para el sangrado, que es de particular importancia en los países de bajos ingresos donde la sangre es un recurso escaso y costoso.
Por lo tanto, el codirector del Centro Colaborador de la OMS para la Salud Mundial de la Mujer en la Universidad de Birmingham y director del ensayo, el profesor Arri Coomarasamy, subrayó que “este nuevo enfoque para tratar la hemorragia posparto podría mejorar radicalmente las posibilidades de las mujeres de sobrevivir al parto en todo el mundo, ayudándolas a obtener el tratamiento que necesitan cuando lo necesitan”.
De hecho, añadió, “el tiempo es esencial cuando se responde al sangrado posparto, por lo que las intervenciones que eliminan los retrasos en el diagnóstico o el tratamiento deben cambiar las reglas del juego para la salud materna”.
Actualmente, un desafío importante para responder a la hemorragia posparto es que a menudo se detecta demasiado tarde para responder de manera efectiva. En la mayoría de los casos se utiliza la inspección visual para evaluar el sangrado, que tiende a subestimar la pérdida de sangre y puede llevar a retrasos potencialmente mortales en el tratamiento.
- Te recomendamos -
