El líder de Nagorno Karabaj renuncia debido a la necesidad de un “cambio de enfoque”

MADRID, 31 (EUROPA PRESS)

El presidente de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj, Arayik Haratiunián, ha anunciado este jueves su dimisión tras mantener conversaciones con actores políticos a nivel nacional e internacional ante lo que ha calificado como la necesidad de un “cambio de enfoque” para resolver la situación en la región.

Así, ha señalado que la medida ha sido tomada debido a la “inestable situación geopolítica actual en el mundo, los acontecimientos regionales y los acontecimientos previstos”, así como los “fenómenos” que ocurren en Artsaj –nombre oficial de la república de Nagorno Karabaj–.

Todo esto “sugiere directamente que es necesario cambiar enfoques y medidas, mostrar flexibilidad”, ha dicho antes de manifestar que “para lograr lo anterior, es necesario cambiar a los actores principales en Artsaj”, incluido él.

En este sentido, ha aclarado que presentará su dimisión este viernes ante el pueblo y la Asamblea Nacional de Nagorno Karabaj. “Tomé esta decisión final hace dos días, teniendo en cuenta mis interacciones con todos los actores internos y externos durante las últimas semanas”, ha aseverado, según un comunicado. “Esta es una decisión tomada únicamente por mí en función de los resultados del análisis de los datos con los que cuento”, ha explicado.

Haratiunián, que ha confirmado que seguirá residiendo en la región junto a su familia, ha recordado que llegó al cargo en 2020 con la idea de “fortalecer la capacidad de defensa de Artsaj y garantizar la inviolabilidad de sus fronteras”.

“Lamentablemente, apenas cuatro meses después, Azerbaiyán desató la guerra de 44 días que terminó con nuestra derrota. Por supuesto, se me puede echar toda la culpa de la derrota, y no rechazo la responsabilidad en absoluto, pero cada uno de nosotros tuvo su parte de responsabilidad según su estatus y habilidades”, ha aseverado.

El mandatario ha pedido disculpas públicamente al pueblo armenio por su “parte de culpa” y ha reiterado que “tomó las medidas que estaban a su alcance” en aquel momento. Tras la guerra, ha explicado, la región “estaba al borde de la destrucción, por lo que era urgente volver a garantizar la estabilidad y la fuerza interna”.

“Quizás esa fue la razón por la que Azerbaiyán está dispuesto a destruirnos a cualquier precio, a cometer genocidio en 2022. El bloqueo de Artsaj comenzó el 12 de diciembre de 2022 y, a partir del 15 de junio de 2023, también el asedio total. También sucedió porque, a pesar de las provocaciones y represiones diarias contra el pueblo de Artsaj, este continuó con su sagrada labor”, recoge el texto.

Haratiunián ha sostenido que el bloqueo azerí comenzó hace ya nueve meses y ha alertado de que la población de la región está siendo sometida a un “genocidio abierto”. “Hemos tomado todas las medidas posibles dentro de nuestras capacidades para presentar la situación al mundo y recibir apoyo de la comunidad internacional”, ha continuado.

Si bien ha reconocido que cientos de entidades internacionales han hecho declaraciones y llamamientos al respecto, ha advertido que “nada ha frenado el comportamiento agresivo de Azerbaiyán”.